Normalmente se utilizan para soportar una carga de apriete, proteger las superficies de contacto contra las rayas o erosiones que pueden producir los tornillos o tuercas por rozamiento, reducir los riegos de aflojamiento y la sujeción de cables en las conexiones eléctricas. Se utilizan ajustadas al rededor de un tornillo y bajo la cabeza de este o de una tuerca para minimizar el enclavamiento de la cabeza del tornillo o tuerca y distribuir cargas sobre áreas grandes.
Se usa para soportar los aisladores tipo pin y apoyarse en las crucetas de madera en las redes del sistema de distribución.